El ritmo y la carga de trabajo varían para cada trabajador, pero lo que todos tienen en común es que tienen momentos de cansancio y, por lo tanto, baja productividad.

Anteriormente, el trabajo en oficina permitía tener una rutina más clara con respecto al horario de comida, que era una manera de desconectarse del trabajo. Actualmente, el teletrabajo brinda más autonomía, pero irónicamente igual puede resultar complicado ajustar el calendario de actividades; ante esto, lo ideal es hacer micropausas, señala un estudio a cargo de la Universidad de Carolina del Norte, Estados Unidos.

El estudio, efectuado mediante una encuesta internacional, permitió conocer que estas pausas de descanso ayudan a mejorar la agudeza mental, de modo que dan tregua a la fatiga, irritación e incluso estrés ante determinados proyectos. Durante el tiempo de descanso, los empleados pueden efectuar actividades que los ayuden a despejar la mente, como revisar las redes sociales, salir a caminar o simplemente quedarse sentado mientras disfruta de un café. 

El momento “correcto” varía

Aunque se trata de actividades básicas, los expertos sugieren a los jefes implementar estos descansos, como parte de la rutina de los colaboradores, independientemente de que trabajen en la oficina o hagan teletrabajo. Adicional, recomiendan que los colaboradores tengan la libertad de decidir en qué momento darse esos descansos, ya que cada persona es diferente y sabe cuándo necesita de estos.

Al respecto, la psicóloga Sophia Cho, profesora de psicología en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, expone que “un descanso de cinco minutos puede ser de gran ayuda, si se toma en el momento adecuado”, ya que “ayudan a administrar los recursos energéticos a lo largo del día, y eso es particularmente beneficioso en los días en que está cansado”.

Descanso previo

Pero la psicóloga, quien hace unos años hizo un estudio para conocer los efectos de los descansos de 5 minutos, igual destaca que cuando las personas llegan cansadas al trabajo, tienen a tomar más breaks de lo habitual. Por lo tanto, “quienes toman pausas cortas programadas, tienen mejor control de las energías, ayudándoles a completar sus tareas diarias y sentirse mejor con respecto a su trabajo”.

Por lo tanto, esto destaca la importancia de que los trabajadores duerman las horas necesarias para el correcto descanso que, en sí, es el primer paso para tener energía no sólo en la jornada laboral, sino en todas las actividades del día. Además, igual deben considerar aprender a dividir la vida personal de la laboral, dándole espacio al esparcimiento, efectuando actividades de su preferencia y, de ser posible, integrando rutinas de activación física.